miércoles, 31 de diciembre de 2008

El hechizo de la circularidad



Parménides, tras elaborados y algo confusos razonamientos dedujo, entre otras cosas, que la multiplicidad es pura ilusión, es decir, que todo lo existente es inmutable, homogéneo, único y ... esférico. Influido por la teoría pitagórica de que la realidad de las cosas es dada por el límite y la forma, pensó que lo existente tendría por tanto una forma. Y si lo existente es homogéneo, su forma debía ser la esfera, pues no hay razón ninguna para que se extendiese más en un sentido que en otro.La forma es perfecta.
Sin duda esta visión del mundo influyó en Platón, que abrazó la circularidad con auténtica veneración dada su perfecta simetría, y la convirtió en uno de los dogmas de la geometría .
El hechizo de la circularidad tuvo una gran influencia en la astronomía. En un típico argumento místico, se pensó que si el movimiento de los astros había sido diseñado por la divinidad, debía seguir el más perfecto de los movimientos y este, como todo el mundo creía saber, era el movimiento circular. Como los datos observacionales no se condecían con tan perfecto movimiento, los astrónomos se dedicaron a añadir más y más círculos , llegándose en la época de Ptolomeo a un sistema con más de ochenta deferentes y epiciclos.
Curiosamente, sería Kepler, tan proclive a la herencia pitagórica y platónica, el que acabaría con el hechizo, estableciendo a partir de datos empíricos que los planetas se mueven en órbitas en forma de elipse, curva que, por otra parte, era ya conocida por los griegos al menos 1800 años antes.
El hombre es un ser geométrico.La mente humana está configurada para concebir en términos de temporalidad y espacialidad.Y es casi incompatible con conceptos como infinitud,atemporalidad ....(Sólo ciertos físicos y astrónomos parecen navegar por estas ideas sin turbulencias en su espíritu y en su razón).
Lo perturbador de los hechizos de las formas perfectas y de una divinidad que no puede menos que crear perfecciones ( qué habrá sido el hombre, me pregunto...¿su peor error ?) es que circunscriben el espectro de lo posible.Limitando las ideas, como lo hicieron en su época los ptolomeicos, sin lograr evitar que mentes libres de los prejuicios del dogma establecido llegaran a la forma de elipse superponiendo círculos.
La suma de formas perfectas dio como resultado una forma imperfecta para el pensamiento geométrico-divino de Aristóteles, como lo era una elipse.
Imperfección que como silogismo perverso, como trampa a la razón y al credo ...era paradójicamente la forma acertada.La verdadera.

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